jueves, 14 de julio de 2016

HIELO Y LIMÓN

La media noche nos sorprendió entre copas
Irremediable revelarse al destino
Como se revelan los árboles en otoño
Como se mezclaron las sábanas en la madrugada
Mirar no se mira
Tocar no se toca
Se respira, se siente
se viene, se va
Y así, cabizbaja y risueña llegó el alba.
Ya sin ginebra, ya sin limar.

Susurro nuestros nombres
 y ya nadie responde.
Fueron las luces, las colchas
Tus ojos. El Coche.
Quizás ese reloj gastado y sin tiempo
Que vertió tus besos en la copa y se fue.
Así empiezan las aventuras
Lanzando al aire un deseo
Lanzando la copa
Bebiendo de tus labios.