jueves, 18 de mayo de 2017

VOZ QUEBRADA



Emerge como un suspiro, arrancada de mis pulmones

como un descubrimiento:

ya no mueres, envejece tu cuerpo.


Grita con desgarro, temiendo el auxilio

y entretiene la noche.

Teme la herida, la huella y su silencio.


Alcanzaron su fin aquellos sueños de madrugada,

hoy, son todo pesadillas, pesares, pensares.


Emerge como un suspiro, arrancada de mis pulmones

ya no muero, envejece mi cuerpo,

envejece mi pensar, envejece mi voz.


Esa voz quebrada, rebelde, vengativa

que evoca su pasado,

equivoca su presente,

y fallece, en su unívoca tozudez futura,

donde cabalgar, volar, soñar,

ahora es toser...


Y el ser... emerge como un suspiro,

se esconde entre las bambalinas del parecer,

y poco a poco,

derrumba emociones,

destruye nostalgias,

y poco a poco, desvanece una imagen,

que entre el blanco y el negro eligió la sangre,

escogió el atajo,

y ya no muere, sólo envejece.